martes, 28 de julio de 2015

¿Qué es lenguaje en Michel Foucault? El orden del discurso



Marvin Amílcar Pérez
13  diciembre  2013
¿Qué es lenguaje en Michel Foucault?
El orden del discurso

El objetivo de este pequeño trabajo  es  responder a la pregunta sobre el lenguaje en la filosofía de Foucault. Este pensador  insiste que en el discurso podemos encontrar, algo que el discurso dice, pero que también hay algo que este no dice.  Foucault era persona realmente comprometida con su tiempo, se preocupó por los  presos, los locos, el tema de las cárceles y de los hospitales psiquiátricos, el tema de los centros educativos. Estos construyen un discurso. Aquí vamos a tratar de comprender el pensamiento de Michel Foucault, en sus escritos. El orden del discurso. Las palabras y las cosas. Y la Arqueología del saber. Y ¿qué es la literatura? 

 Primero el Orden del discursos. El discurso según Foucault no es simplemente aquello por lo que, y por medio de lo cual aquel poder del que quiere adueñarse. Las palabras dicen pero también ocultan y detrás de ellas está el poder. El discurso puede permitir, prohibir, excluir, separar rechazar, con estas categorías Foucault se dirige a los locos y a los privados de la libertad,  discurso  en las cárceles. Según Foucault que toda sociedad la producción del discurso está controlada.  Las sociedades como las nuestras son bien conducidas por los procedimientos de exclusión. Se sabe muy bien que no se tiene derecho a decirlo todo. Que no se puede hablar de todo. Entonces podemos plantearnos una pregunta ¿se podría hablar  de las partes separadas del todo? El deseo según Michel Foucault “yo no quería tener que entrar yo mismo en el orden azaroso del discurso”. El discurso es una malla compleja, que se extiende por toda la sociedad, y como la palabra podría liberarnos, pero podría oprimirnos al ser manipulados.

El problema de la locura a través de las palabras era como se reconocía al loco. Pero entonces, ¿quién excluía al loco?  La palabra misma mediante el discurso la sociedad decía este está loco y este otro es normal. Hoy en día la palabra loco ya no está del otro lado de la línea de pensamiento. El loco según Foucault jugaba el papel de la verdad enmascarada. ¿Qué es el discurso en su realidad material?  Como cosa pronunciada o escrita.

Según Michel Foucault, “no hay porque tener miedo de empezar todos estamos aquí para mostrarte, que el discurso está en el orden de las leyes, que desde de mucho tiempo se vela por su aparición que se le ha preparado un lugar, que le honra que se le desarma y que consigue algún poder, es de nosotros  y únicamente de quien lo obtiene” [El orden del discurso, Foucault, 1992,4]
Desde no reconocer que las leyes son hechas para reprimir seriamos más que ignorante. Foucault dice que desde los antiguos, se empieza en este sentido que la ley ejerza el poder en la voluntad de verdad, es la voluntad decir que el discurso el verdadero.

Las palabras y las cosas

El lenguaje real no es un conjunto de signos independientes uniforme y liso que las cosas vendrán a reflejar. El lenguaje para Foucault no es un sistema arbitrario, está depositado en el mundo y forma parte de él, porque las cosas mismas ocultan y manifiestan su enigma como un lenguaje y porque las palabras se proponen a los nombres como cosas que hay que descifrar. Toda la persona que habla hace uso del lenguaje, para nombrar las cosas. Pero si calla ¿qué está pasando? Podría ser que su discurso este condenado  es decir prohibido. El lenguaje forma parte de la gran distribución de similitudes y signaturas. El lenguaje no es lo que es porque tiene sentido. Siempre que hablamos de algo, eso que decimos a través de la palabra ya sea esta hablada o escrita, se hace uso  del lenguaje.
Foucault hace una pregunta dice así, ¿qué quiere decir, en general no poder pensar un pensamiento?  Construir un pensamiento completamente nuevo que haya cortado con todo lo tradicional de una sociedad. Para comprender introduce una categoría fundamental Michel Foucault habla de la categoría de discontinuidad. Esta época temporal se puede ubicar según Foucault que bien o que correctamente ha sido llamado el barroco a principios del siglo XXII. Aquí ubica primero que nada al Márquez de Zade, y luego en esta época de la discontinuidad están los poetas malditos. Este discurso esta literatura fue condenada porque era prohibida o excluida. ¿Cómo puede el discurso enunciar todo contenido de una representación? Foucault responde, así, porque está hecho de palabras que nombran parte por parte, a lo que se da a la representación. La palabra misma designa nombra, nombre propio ya que está dirigida hacia  tal representación. “la génesis del lenguaje a partir del lenguaje de la acción escapa por completo a la alternativa entre la imitación natural y la convicción arbitraria”. [Las palabras y las cosas, Foucault, 1972, 112]. 

Allí donde no hay algo natural, no hay ninguna semejanza, la relación descubre las diferencias y las  semejanzas. En primer lugar permite el artificio.  El segundo excluye lo arbitrario, pero abre vías al análisis no serán exactamente superponibles en todos hombres y en todos los hombres y en todos los pueblos. La ley de la naturaleza dice Foucault es la diferencia de las palabras y de las cosas, la participación vertical entre el lenguaje y aquello por debajo de  él está encargado de designarlo.
Así, dice Foucault, “saber consiste en referir  el lenguaje al lenguaje; en restituir la gran planicie uniforme de las palabras y las cosas”. [La palabras y la cosas, Foucault, 1972, 48]. Lo propio del saber no es ni ver ni demostrar, sino interpretar.  Y entonces ¿cómo lograr dicha interpretación? En el caso de Michel Foucault es por medio del método este se llama la arqueología del saber, el investigador es capaz de escarbar el discurso y desmenuzarlo por completo, es aquí donde se aplica la metáfora del arqueólogo. Otro método que podría aplicar aquí es, la hermenéutica esta metodología se ocupa de la interpretación del discurso; la hermenéutica es saber hablar, saber escribir, todo esto se logra por medio del lenguaje.

Se habla de una escritura que forma parte del mundo; se habla al infinito de ella y cada uno de sus signos se convierte a su vez en escritura para nuevos discursos; pero cada discurso se dirige a esta escritura primigenia a cuyo retorno promete y desplaza al mismo tiempo. “vemos, pues, que la experiencia del lenguaje pertenece a la misma red epistemológica que el conocimiento de las cosas de la naturaleza”. [Las palabras y las cosas, Foucault, 1972, 49.] Conocer las cosas es revelar el sistema de ideas dice Michel Foucault, las semejanzas que hacen ser próximas. De la misma manera que el saber de la naturaleza encuentra siempre nuevos signos de semejanza porque ésta no puede ser conocida por sí misma y los signos no pueden ser otra cosa similitudes.

La arqueología del saber

La categoría que hace aparición en el escenario del discurso de  Michel Foucault es la categoría de discontinuo. Es la ruptura del umbral del milite de la serie de transformaciones se plantea todo el análisis histórico, no solo cuestiones de procedimiento, sino que problemas teóricos. Hay que realizar ante todo un trabajo negativo, liberarse de todo juego de nociones que diversifican, cada uno su modo, el tema de la discontinuidad. Esta categoría del cual hace mención Michel Foucault para oponerse a la tradición discursiva. Este pensador propone reconstruir el lenguaje científico y filosófico a través de ese concepto de la discontinuidad.   Para Foucault este discurso tiene cuatro características.
1)      Las condiciones para que surja un objeto de discurso, las condiciones históricas para que se puede “decir de algo”, y para que varias personas puedan decir de las cosas diferentes las condiciones, las condiciones para que inscriba en un dominio de parentesco con otros para establecer relaciones de semejanza.
2)      Estas relaciones se hallan establecidas entre instituciones, procesos económicos  y sociales, formas de comportamiento, sistemas de normas, técnicas, tipos de clasificación, modos de caracterización; y estas relaciones no están presentes en los objetos; no son ellas las que se despliegan cuando se hace su análisis.
3)      Estas relaciones se distingue ante todo de las relaciones que podrían llamar “primarias” y que, independientemente de discurso o de todo objeto de discurso, pueden ser descritas entre i instituciones, técnicas formas sociales etcéteras.
4)      Las relaciones discursivas según se ve no son internas del discurso: no ligan  entre ellos los conceptos y las palabras: no establecen entre frases o las proposiciones una arquitectura deductiva o retoricas. Pero no son sin embargo unas relaciones exteriores al discurso que lo limitarían, o le impondrían ciertas circunstancias. [La arqueología del saber,  Foucault, 2010, 63-64]. 

La arqueología

¿Qué es la arqueología para Michel Foucault? Lo que la arqueología trata de describir no es la ciencia en su estructura especifica dice Michel Foucault, sino que el dominio muy diferente al saber. Además, si se ocupa del saber en una relación con las figuras epistemológicas y las ciencias, puede igualmente interrogar el saber una dirección. A lo que se está refiriendo Foucault es a la metodología por medio del cual el investigador hace su interpretación científica o filosófica. Es exacto que yo no he presentado jamás la arqueología como ciencia, ni siquiera como los primeros cimientos de una ciencia futura dice Michel Foucault. La palabra arqueología no tiene en absoluto valor de anticipación; designa únicamente una de las líneas de ataque para el análisis de las actuaciones verbales. La arqueología intenta establecer, para definir las condiciones de sus relaciones.

¿Qué es la literatura?

Es de mucho interés el concepto de discontinuidad la literatura hace las rupturas con la forma tradicional. De hacer las artes, Michel Foucault les atribuye esta discontinuidad de la literatura a los poetas malditos.
 “Por el contrario, la literatura comienza cuando ha callado, para el mundo occidental, o para una parte del mundo occidental, aquel lenguaje que no se había dejado de oír, de percibirse, de estar supuesto durante milenios” [Foucault, 2005: 447]
“La literatura es trasgresión, es la virilidad del lenguaje contra la feminidad del libro, pero, ¿qué puede ser finalmente ella sino un libro entre todos los demás, un libro junto a todos los demás, en el espacio lineal de la biblioteca?”[Foucault, 2005: 448]
La literatura nace dice Michel Foucault cuando Dios ha muerto, es posible que esta herencia la haya tenido Foucault de Nietzsche, en sus etapa genealógica.  

FILOSOFIA DE LENGUAJE

Sin embargo, ¿es realmente posible esta utopía husserliana de la razón heroica?  Die Krisis nos enseña que es necesario rehacer el camino de la racionalidad,  aunque no desde cero, porque nacemos ya dentro de la razón y del lenguaje.
Además, Merleau-Ponty reconoce la importancia del lenguaje para el esclarecimiento de este problema: la palabra prolonga y transforma la muda relación  con el otro. Sin embargo, está de acuerdo con Husserl en que la intersubjetividad se constituye antes del lenguaje, es la predisposición a éste y se proyecta a través de la historia y la cultura. No cabe duda, sin embargo, de  que el lenguaje es la operación gracias a la cual el pensamiento adquiere valor  intersubjetivo y el otro se convierte en alter ego, se hace plenamente significativo.

El lenguaje cobra desde su origen la significación de conciencia materializada, de "conciencia práctica". Para Marx y Engels:

"El lenguaje es tan viejo como la conciencia; el lenguaje es la conciencia práctica, la conciencia real, que existe también para los otros hombres y que, por tanto, comienza a existir también por sí mismo; y el lenguaje nace, como la conciencia de la necesidad, de los apremios del intercambio con los demás hombres".  Esta cita la hemos tomado de   [Florencio Jiménez Burillo, 2003, 239] en su texto titulado, “K. MARX Y L. WITTGENSTEIN: ELEMENTOS PARA UNA TEORÍA SOCIOPSICOLÓGICA DEL CONOCIMIENTO”
Conciencia y lenguaje son constitutivos de una pareja dialéctica: la conciencia se expresa en el lenguaje, el lenguaje es vehículo de la conciencia y ésta es lenguaje interiorizado. Desde un principio, el marxismo enfatiza, la conciencia se muestra sobre las relaciones productivas y de intercambio, como su lenguaje necesario: "el lenguaje de la vida real". Es, a su vez, el lenguaje de la vida social, un vínculo comunicante entre los individuos comprometidos vitalmente con la reproducción de su existencia material.

A la pregunta que nos propusimos en el curso de filosofía del lenguaje  ¿cuál es el propósito del lenguaje en el siglo XXI, o  cual es el análisis de la filosofía del lenguaje?  Nosotros trataremos de dar una definición y no vamos a dejar mencionar que durante la lectura que  hiciéramos de  Michel Foucault nos dejó impresionados por su discurso contestatario. Ahora bien; para nosotros la filosofía del lenguaje en el siglo XXI, debe ser antes que nada un discurso discontinuo capaz de transgredir el discurso cotidiano. Esta filosofía de lenguaje tendría que ser capaz de analizar todo tipo de discurso. Pero creemos que debe lanzar su crítica a tres niveles específicos. Primero lanzar un análisis hermenéutico del lenguaje fenoménico del hombre y de la mujer común de esta sociedad Unidimensional. El comerciante, el demagogo, las falacias de ad populum. Segundo debe hacer un análisis del lenguaje político y en este país, la demagogia politiquera. Y en un tercer nivel, el análisis  del discurso totalitario, ejemplo, el discurso neoliberal que es profundamente vertical, y antes estos  discursos de semejante naturaleza, la filosofía de lenguaje debe construir un lenguaje alternativo, contestatario, de vanguardia liberador, la filosofía de Michel Foucault a nuestro parecer nos da los elementos para  filosofía. El materialismo histórico no está lejos de dicho análisis antes mencionado.

Bibliografía

Foucault, Michel [1972] “Las palabras y las cosas”. Editorial siglo XXI. Buenos Aires Argentina.
Foucault, Michel [2010]. “La arqueología del saber”.  Editorial siglo XXI. Buenos Aires Argentina.
Foucault, Michel [2005]. “¿Qué es la literatura?” Editorial Paidós. BRCELONA España
Foucault, Michel [1992]. “El orden del discurso” editores Buenos Aires. 

4 comentarios:

  1. Muy bueno, gracias. Hay que revisar un poco los signos de puntuación.

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  2. Información muy interesante, pero la manera de expresarla no es demasiado elegante, la verdad. Hay frases construidas de una manera algo descuidada.

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